quinta-feira, 1 de outubro de 2009

La chicha





La chicha é uma bebida feita da fermentação do milho (maíz) [origem do nome chicha]com baixo teor alcólico e feita de forma artesanal muito consumida na região andina. Era considerada a bebida mágica dos deuses (Apus) e era usada em rituais religiosos. Hoje, virou uma bebida típica apreciada pelos turistas e usada pelos locais em todas as ocasiões.

La chicha habita en el centro de la cosmovisión andina, a través del tiempo y en todas las regiones, el hombre peruano, de una u otra manera, ha necesitado comunicarse con los dioses para tomar  decisiones sobre su vida, cuerpo y alma. Para esta importante tarea usa la fe, la meditación, diversas ceremonias, algunos alucinógenos y mucha chicha, que hacen posible el sagrado encuentro.

Deixo aqui duas receitas para fazer La Chicha. Apesar que eu aconselho que você visitar um país andino é a melhor forma de degustá-la.

A primeira é a forma primitiva como era feita ainda na época anterior à chegada dos espanhóis.

Instrucciones:

El proceso primitivo,

consistía en la trituración del grano usando la boca

y mezclándola con la saliva, así se obtenía una pasta

que era reunida en vasijas de barro,

las que posteriormente eran dejadas para que fermentaran y produjeran este "exquisito" licor, La Chicha, la bebida de los Apus.

A segunda é a forma mais moderna, mas ainda artesanal:

Instrucciones:

Moler el maíz.

Agregar a la masa un poco de miel y agua, de manera que quede bien remojada.

Poner en una olla de barro por 15 días para que fermente.

Molerlo de nuevo y añadir más agua y miel hasta obtener una masa suave.

Luego, hacer con esta masa las bolas, a las que se le hacen con los dedos unos huequitos en forma de cruz.

Cubrir el fondo y las paredes de la olla de barro con hojas de helecho silvestre y llenar el recipiente con agua, con mucho cuidado, para no mover las hojas de helecho.

Las bolitas de maíz ponerlas a cocinar por 12 horas a fuego muy lento, agregando agua, si es necesario.

Luego colar la mazamorra, agregando agua fresca hervida y miel.

Tapar la olla y dejar fermentar el líquido por 10 días, agregándole diariamente un poco de miel y revolviéndolo para que se disuelva.

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